domingo, noviembre 07, 2004

Antes y ahora

Voy a redactar de nuevo un mail que me ha llegado en forma de cadena, muy desgastada, en muy mal estado. Ilustra bastante bien como los niños, y por extensión los adolescentes de hoy en día están sobreprotegidos. La persona que escribió esto debe tener unos 45 o 50 años, pero a los de 30 muchas cosas también nos suenan bastante.

Salud: Nosotros dormíamos en camas pintadas con colores chillones a base de pintura con plomo, no llevábamos cinturón de seguridad ni asiento especial cuando éramos más chiquitines (los airbag y otros dispositivos eran ciencia-ficción). Bebíamos agua de la manguera, a morro de la misma botella. No había dispositivos de seguridad en los medicamentos, ni en los productos de limpieza.

Seguridad: Salíamos a jugar.. ¡a la calle! con la única condición de volver a casa antes de que anocheciera. Íbamos a comer a casa al mediodía, y en ese intervalo de tiempo estábamos fuera de control de nadie, puesto que aun no existían los móviles.

Escolarmente: Los alumnos que suspendían, repetían. No iban a ver a psicopedagogos, ni a psicólogos. No se conocía la dislexia, ni la falta de atención, ni la hiperactividad. Para los alumnos con problemas, existían las segundas oportunidades.

¿Cómo hemos llegado vivos hasta aquí?

Yo añado: ¿cómo es posible aprender si uno no se equivoca, se pierde, fracasa alguna vez? ¿Si uno no adquiere responsabilidades de manera paulatina, si no les dejamos salir de esa jaula de oro?