lunes, febrero 21, 2005

Punta Tecnología

Las TIC o las nuevas tecnologías aun distan mucho de estar presentes en el día a día de los centros educativos. No debería haber aulas de audiovisuales, ni aulas de informática. Todas las clases deberían tener recursos audiovisuales y un ordenador por alumno. Los profesores deberíamos tener una preparación obligatoria (como la tuvimos en su momento con el catalán) en el dominio de estas tecnologías: sería el único modo de integrarlas en las clases.

Este enfado viene porque en la asignatura de AR, que como comenté no tiene libro, tengo asignada para mi una de las dos clases multimedia. Esto es por pura necesidad ya que sin un apoyo diferente de los rollos que yo pueda soltar sería pesadísima. Ello me obliga, por compañerismo, a tenerla que dejar cuando otros Mestres la necesitan, bajo pena de caer en la impopularidad o en la fama de insolidario si digo muchas veces que “no”.

Hoy ha pasado, con todo, algo peor, y es que otro Mestre estaba probando un aparato nuevo en la susodicha aula multimedia para la jornada de puertas abiertas que se celebra próximamente. Me lo ha desconfigurado todo de tal manera que no ha sido posible utilizar el Dvd ya en esa hora (había pasado mucho tiempo y los niños se iban a quedar sin ver el final del reportaje sobre los budistas tibetanos). Se han puesto nerviosos, he perdido una clase y hasta ha venido a ver qué me pasaba Asun, una mestra amiga, de lo atacao que estaba. Se me ha llevado una niña a hacer una reflexión, lo cual le he agradecido mucho.

-Esa, es una ordinaria, me ha dicho después. Tiene que aprender a controlarse. Y eso que ya le dan pastillas en su casa.
-Hay que echarle el pan desde lejos para que no te muerda, jejeje
, le he contestado yo.

Y después de este brainstorming de desahogos improvisados, nos hemos ido tan contentos a la siguiente clase.